Son dos viejos amigos que están bebiendo en un bar. Ya llevan alguna copa de más, y están "un poco" contentos. - Pues mira, somos tan buenos amigos que ni siquiera me importaría compartir contigo mi mujer. - Eso habría que verlo. - Que si, que si, venga, vamos a mi casa y nos acostamos los tres. - Oye, pero... ¿a tu mujer no le importara? - No, hombre, no, pero si tu eres mi amigo, ¡qué le va a importar! Total, que van a la casa. - ¡¡Mari!! ¡¡Mari!! Pero no se oye nada. - María, ven aquí, ¡mira quien ha venido! Pero la Mari no contesta. - Oye, parece que mi mujer no esta en casa. ¿Qué te parece si vamos a tu casa y nos acostamos con tu mujer?
|