Una mujer que tenía tres niños da a luz al cuarto. Cuando el marido entra a la habitación del hospital y lo ve‚ se queda perplejo. Los 3 anteriores eran unos niños preciosos, rubitos, ojos azules, fuertes y este era enclenque, moreno, ojos negros, feo de la ostia.
A los pocos días le dice a la mujer:
- "Oye Paloma dime la verdad, no me voy a enfadar pero este hijo no es mío, ¿verdad?"
A lo que ella contesta:
- "Cariño el hijo es tuyo y mío"
Pasa el tiempo y los 3 primeros crecían fuertes, eran más guapos, altos, inteligentes (y eso que eran hombres) y el último seguía igual de feo, enclenque, le tienen que poner gafas culovaso, enfermizo... total que el tío le insiste:
- "Oye Palomita, tú sabes que yo te quiero mucho, que no me voy a enfadar pero dime la verdad, este niño no es mío, ¿verdad?"
Y Paloma le contesta:
- "Que si amooorrr, que el niño es tuuuuyo"
Total que la cosa sigue así algún tiempo y cuando está el tío en el lecho de muerte le dice a la mujer:
- "Paloma, (agonizante)... ves que me estoy muriendo,... me quedan horas de vida... pero no quiero morir sin saber la verdad.... dímelo, por favor,....Pedrito no es hijo mío, ¿verdad?"
Y ella contesta:
- "Cielo, Pedrito SÍ es hijo tuyo... quienes no lo son, son los otros tres".
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